Entrena tu CEREBRO para lograr una MENTALIDAD de ÉXITO

La mentalidad correcta es uno de los elementos esenciales para tener éxito en cada de una de las metas que establezcamos en nuestro camino profesional.

26 de abril de 2022
Foto: Envato Elements

¿Qué se necesita para ser exitoso?

Muchas cosas, es cierto. Veamos lo que se le viene a la mente a la gente en primer lugar cuando definen lo que se necesita para tener en la vida. La primera respuesta, y aparentemente la más obvia resulta ser el trabajo duro.

Seamos honestos desde un comienzo:

Sí, toma trabajo duro. Sí, requiere conocimiento de tu industria y la capacidad de conectarte con los clientes correctos.

El valor del trabajo duro, un paradigma que debe evaluarse

Pero la idea de que se necesita trabajo duro o que es lo único se necesita para tener éxito en la vida puede estar viciada por muchos paradigmas culturales e históricos que hoy ya no tienen la misma vigencia.

Desde tiempos inmemorables la agricultura moldeó las concepciones sobre el trabajo y la vida en común. Siendo la humanidad, una sociedad principalmente agraria la mayor parte de su historia, no es extraño que las concepciones sobre el trabajo agrícola hayan moldeado las demás perspectivas históricas sobre lo que significa “trabajar”, “ganarse la vida” o “trabajo duro”. ¿Sigue siendo esto válido hoy? Esa es una pregunta que muchas personas ya se han empezado a hacer.

Al requerir un gran esfuerzo, y al ser la principal forma de trabajo durante la mayor parte de la historia humana, las nociones del trabajo agrícola se han adoptado por la mayor parte de la humanidad y en la mayoría de los empleos. Sin embargo, esto no quiere decir que el trabajo duro sea lo único que se necesite para tener éxito en la vida, e incluso no quiere decir que sea lo fundamental.

La idea de trabajo duro puede tener cierto arraigo moral. Las personas aprecian el trabajo duro, sobre todo, porque cuando está combinado con otras formas de hacer las cosas ( como cierta experticia y diligencia) puede llevar a resultados increíblemente beneficiosos para un conjunto de personas. Aún así, si estás considerando que todo lo que necesitas para triunfar en la vida es trabajo duro deberías reconsiderar tus ideas hoy mismo. Hay una revelación que te está esperando en las siguientes líneas.

Veamos.

La mentalidad correcta

Si te lo estabas preguntando, la respuesta al camino al éxito, que va más allá del trabajo duro, simplemente es la mentalidad correcta.

No todas las personas la tienen y precisamente por esto es que es tan valiosa.

Las personas que poseen la mentalidad correcta son capaces de superar las circunstancias más difíciles y sortearlas de manera positiva. En pocas palabras, ellas poseen el atributo de la resiliencia.

Estas personas no se dejan vencer por el primer asomo de negatividad sino que se constituyen a sí mismos como creadores de su propio destino Para ellas, el futuro no es algo que viene determinado por las circunstancias en las que nacieron, por el azar, o por las conexiones personales que se tienen como el resultado de ser parte de una élite. Para este tipo de personas, ellos mismos son los creadores del mañana.

En definitiva, las personas con una mentalidad correcta, asumen la responsabilidad de ser los aquitectos de su destino y trabajan fuertemente para alcanzar sus metas. Sin embargo, como dijimos desde el comienzo, no consideran que el trabajo duro sea lo único necesario. Además de trabajar duro y hacerse responsables de su destino, este tipo de personas también tienen una actitud positiva y creen que el futuro es una realidad abierta frente a la cual siempre es posible enfrentarse como un vencedor.

Una mentalidad de éxito puede ayudarte a superar incluso los obstáculos más difíciles, mientras que un pensamiento negativo podría crear grandes contratiempos, aun si trabajas duro y tienes conocimiento de la industria.

Pienso, luego existo

En este momento, probablemente te estés diciendo “Bla, bla, bla”. Estoy demasiado ocupado haciendo trabajado como para pensar”.

Claro, lo conseguimos, construir un negocio es un trabajo duro, y cuando inviertes tanto tiempo y esfuerzo en dar el próximo paso, probablemente no quieras escuchar acerca de las virtudes del poder del pensamiento positivo.

Confía en nosotros, eso no es de lo que estamos hablando aquí.

Lograr la mentalidad de tener éxito va más allá de mantener la barbilla alta. Es más que albergar pensamientos felices.

Se trata de reajustar tu cerebro no solo para creer que quieres tener éxito, sino también para saber que tendrás éxito y para enfilarte hacia un camino en el que siempre estés presionando para alcanzar la cima.

¿Cómo reajustas tu cerebro cada día?

Si bien es cierto que el trabajo duro debe continuar, mientras este proporcione los resultados de base y financieros para enfrentarte a las contingencias del día, también es cierto que debes ir dejando paso al trabajo inteligente.

¿Cómo haces esto?

Las personas con la mentalidad correcta son personas con una actitud de crecimiento y en consecuencia, ellas siempre están aprendiendo. Ellas aprenden nuevas formas de trabajar, buscan nuevas oportunidades, buscan cómo invertir su dinero de manera que este trabaje para ellos. En definitiva. Se trata de avanzar más allá de lo que las circunstancias nos permiten ver hoy.

Tú puedes hacer esto todos los días. Dedica un tiempo a entrenarte en algo que te haga mejor.

Toma un curso de ventas, de oratoria, lee un libro motivacional, escucha un podcast de finanzas y negocios, o de mercadeo. Fórmate en habilidades que te permitan hacer de tu vida un escenario de progreso y de creación de valor. Esto es algo que está al alcance de todo el mundo, todos los días, pero que solo las personas con la mentalidad correcta son capaces de ver.

Tu pensamiento, la formación que adquieres y todas aquellas cosas con las que nutres tu cerebro, son las que te permiten existir de una nueva manera.

¡Es ciencia!

Reescribir tu cerebro para el éxito no requiere una charla de ánimo bien ensayada. No se trata de bombearte y decir cosas como: “Soy el mejor, soy el mejor, soy el mejor”.

Más bien, a lo que se refiere es a entrenar a tu cerebro para pensar de maneras fundamentalmente diferentes.

La capacidad del cerebro para reconectarse a sí misma se llama “plasticidad”, y se enfoca explícitamente en el Sistema de Activación Reticular (RAS) de tu cabeza.

La importancia del RAS

Relativamente hablando, el RAS es una pequeña parte de tu cerebro. Sin embargo, también es un conjunto de núcleos extremadamente poderosos que te mantienen enfocado y concentrado.

Su función es actuar como un filtro, o guardián de acceso para que lo que entra, encuentra el camino en tu mente consciente.

Piensa por un segundo sobre todo lo que ves, oyes y que generalmente sientes a tu alrededor todos los días.

Con la excepción del olfato, que alimenta las porciones emocionales de tu cerebro, el RAS ayuda a decidir qué es importante y qué no para que tu mente no se sienta abrumada.

Usemos un ejemplo que mucha gente experimenta para destacar el RAS en acción.

Cuando las parejas comienzan a querer niños, es comprensible que sus mentes empiecen a enfocarse casi sin parar en todo lo que deben hacer para planificar para tener los hijos.

Desde la cuna hasta el asiento del auto, las visitas al médico y todo lo demás, el bebé está en tu mente todos los días y a toda hora. De hecho, la mentalidad es muy profunda, tu enfoque en tu futura descendencia se manifiesta de maneras increíbles.

Cuando te encuentras en público, los niños o las mujeres que están embarazadas, parecen estar presentes en todas partes.

Cuando estás en casa, todos los comerciales en la televisión parecen contar con un papel destacado en la paternidad.

Y no son solo eventos significativos, que alteran la vida. Tal vez estés ansioso por ver la última película más taquillera.

Cuando sales, ves numerosos carteles publicitarios de la película que no habías visto antes. Alternativamente, prestarás más atención a los artículos de revistas o a las discusiones de los pueblos sobre esa cinta.

Incluso cuando navegas por Netflix, tu cola está llena de películas que presentan al actor y la actriz principal de la película actual que deseas ver.

Entonces, ¿qué está pasando aquí?

No te preocupes. No te estás volviendo loco, y estos sucesos no cobran vida mágicamente.

Tú informaste a tu RAS que estas cosas son importantes para ti, y tu cerebro comienza a centrarse fuertemente en ellas.

No es que estos elementos no estuvieran presentes en el mundo antes, tú eres más consciente de su existencia y les estás prestando más atención.

Y la belleza de todo esto es que puedes entrenar a tu RAS para que trabaje para tu éxito.

La necesidad de un nuevo enfoque

Así que la ciencia del RAS nos conimina a tener un nuevo enfoque si deseamos tener éxito en la vida.
¿Qué es lo que deseamos? ¿Crecimiento personal y financiero? Bueno, enfócate en las cosas que te ayudarán a lograr estos objetivos.

Pero antes que nada, deberás tener muy claro que es lo que quieres. Cuando defines cuáles son tus verdaderos objetivos, entonces podrás comenzar a enfocar tu mente de la mejor manera posible para que tus acciones y las cosas con las que te relacionas cada día te lleven al cumplimiento de esas metas. Si quieres una casa, empezarás a estudiar todos los elementos necesarios para lograr tener esa casa y alcanzar los sueños mucho más pronto de lo que te habías imaginado.

Así que la claridad es clave. Define lo que quieres. Esto nos lleva al siguiente punto.

Es bueno tener objetivos

Con una mejor idea del papel vital que desempeña tu RAS en tu vida diaria, debería ser muy evidente para ti cómo esto afectará tu éxito.

Comienza con el establecimiento de objetivos.

Además del beneficio intemporal de tener algo por lo que apuntar, establecer un conjunto de objetivos claramente definidos reorientará y dirigirá tus esfuerzos en una dirección positiva.

Sin embargo, es más que simplemente escribirlos.

Debes escribirlos y revisarlos.

Repetidamente.

Colócalos en algún lugar donde puedas verlos a diario.

Repítelos una y otra vez hasta que se conviertan en tu ABC del negocio.

Al hacerlo, activarás tu RAS para reconocer, “Está bien, estos son importantes. No estamos bromeando sobre esto. Es hora de concentrar toda nuestra atención en estas cosas”.

De repente, tu mayor conciencia de tus objetivos se acelerará.

Por ejemplo, asumamos que uno de tus objetivos es duplicar las distribuciones en un trimestre próximo en comparación con el mismo periodo del año pasado.

Si no tuvieras esto como un objetivo en el que tu RAS podría enfocarse, seguramente repetirías gran parte de tu planteamiento de distribución del año anterior.

Pero con tus objetivos al frente y al centro y tu RAS en sobremarcha, comenzarás a ver oportunidades que anteriormente habían pasado por alto. De repente, las formas de aumentar los pedidos comenzarán a aparecer a tu alrededor.

Incluso puedes reconocer nuevos enfoques que no tuviste en cuenta o que no se te ocurrieron el año anterior.

Potente, ¿no?

Sin embargo, si quieres ser verdaderamente exitoso y desarrollar por completo una mentalidad de éxito, hay un último paso para garantizarte el éxito final.

El significado de la vida (y los objetivos)

Las metas son buenas, y es importante tenerlas, pero asegúrate de que las que configuras signifiquen algo y sean lo suficientemente tangibles como para convertirse en planes concretos.

Los objetivos vagos y genéricos sobre las cosas que esperas lograr no te llevarán a ninguna parte. Necesitas propósitos concretos a los que tu RAS pueda adherirse.

Así que piensa en sólido, sensible al tiempo y específico.

En lugar de simplemente querer aumentar los ingresos, busca mejorar una cantidad exacta en una fecha precisa.

No intentes llegar a nuevos clientes, alinea un plan para aumentar tu tasa de captura de compradores semana a semana.

Las personas que tienen éxito no simplemente creen que pueden hacerlo. Ellos son los que saben que pueden lograrlo.

Saben que su éxito es inevitable porque han establecido los objetivos correctos, han acordado los planes adecuados y se han entrenado para no esperar mayores logros, sino para concretarlos.

¿Cómo se alinea todo esto con tus valores fundamentales y lo que es el éxito para ti?

Todos tenemos una visión del éxito diferente. Todos tenemos sueños e intentamos trabajar diariamente para lograrlos. Para lograr tener la mentalidad correcta, no solo es necesario tener unos objetivos previamente definidos, sino ser conscientes de cómo se alinean estos objetivos con nuestra visión general del éxito.

El propósito de vida es algo esencial. Y si tienes tu propósito de vida claramente definido te será muy fácil definir una serie de objetivos que te lleven a cumplir esa visión. Revisa qué es lo que realmente quieres en la vida. Haz un análisis de lo que más valoras y de esas cosas que más valoras, establece una lista de prioridades. Una vez que hagas esto, podrás ver cómo es que cada una de tus metas ( a mediano, corto y largo plazo) encajan en ese propósito fundamental de lo que quieres lograr.

Si con lo que sueñas es con una familia feliz, tal vez objetivos y metas como la casa de tus sueños tengan mucho sentido en este propósito, así como un flujo de efectivo constante para llevar un estilo de vida determinado. Si tus sueños son dejar un legado de valor para los tuyos, hacer obras de caridad y crear un sistema de apoyo a tu comunidad, tus objetivos ya no son estrictamente financieros y deberás comenzar a revisar qué metas específicas encajan dentro de esta línea de valores.

Tener un propósito fundamental es esencial porque te brinda orientación, y te ayuda a ver las cosas en perspectiva. Analizar cómo encaja todo esto con tus objetivos, puede ser especialmente beneficioso, ya que lleva a que tu mente se enfoque de la manera correcta y trabaje con la mentalidad adecuada.

Vía | Yoobly

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