“Las ideas que defiendo no son mías. Los tomé prestados de Sócrates. Los robé de Chesterfield. Se los robé a Jesús. Y las puse en un libro. Si no te gustan sus reglas, ¿Qué ideas usarías”.- Dale Carnegie.
“¿Quién era Dale Carnegie?” Bueno, podemos decir que él era un chico que nació hace 110 años. Murió en 1955. Era un hombre rico, un hombre muy exitoso.
Escribió un librito llamado “Cómo ganar amigos e influir en las personas”. Llegó a vender más de 30 millones de copias. El libro todavía se vende hoy y es probablemente uno de los mejores libros sobre cómo mejorar tus habilidades sociales.
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Carnegie luego continuó escribiendo más libros y creando cursos sobre cómo interactuar con la gente, cómo hacer amigos y cómo ganar influencia.
En este artículo exploraremos 10 de los consejos de Dale Carnegie. Y como dice la cita de apertura, estos consejos han sido probados durante los últimos cientos o miles de años. Son ideas bastante sólidas.
Contenido
- 1 1. Crea tus propias emociones.
- 2 2. No se trata tanto de cosas lógicas.
- 3 3. Tres cosas que es mejor evitar.
- 4 4. ¿Qué es lo más importante?
- 5 5. Concéntrate hacia afuera, no hacia adentro.
- 6 6. Toma el control de tus emociones.
- 7 7. No, los demás no te están frenando.
- 8 8. Entonces, ¿Qué hay para mí?
- 9 9. Cómo ganar una discusión.
- 10 10. Todo tiene que ver con las palabras que dices
1. Crea tus propias emociones.
“Si quieres ser entusiasta, actúa con entusiasmo”.
Las emociones también funcionan al revés. Puedes usar eso a tu favor. Si estás atrapado en una emoción negativa, a menudo puedes sacudirla. Cambia tu cuerpo, cómo te mueves, te sientas y te paras, y actúa como te gustaría sentirte. El entusiasmo y otras emociones positivas son mucho más útiles y placenteros para todos en una interacción. Porque…
2. No se trata tanto de cosas lógicas.
“Cuando trates con personas, recuerda que no estás tratando con criaturas de lógica, sino con criaturas de emociones”.
Esto es tan clave. La lógica es buena pero al final, en las interacciones y en la vida, somos criaturas emocionales. Enviamos y recibimos emociones de otras personas. Esa es una de las razones por las que se suele decir que el lenguaje corporal y la tonalidad de la voz representan hasta el 93 % de la comunicación. Ahora, esos números son para algunas situaciones específicas, pero creemos que estas dos formas de comunicación son muy, muy importantes.
El lenguaje corporal y la tonalidad de la voz es un poco como el resto del iceberg, la gran masa debajo de la punta de las palabras que usamos. Esas dos cosas comunican cómo nos sentimos y dan una indicación de lo que estamos pensando.
Y esa es la razón por la que es importante ser capaz de cambiar o mejorar tu estado emocional.
Porque eso tendrá un gran impacto en cómo dices algo y cómo usas tu cuerpo. Y esas dos cosas tendrán un gran impacto en tus resultados y relaciones.
3. Tres cosas que es mejor evitar.
“Cualquier tonto puede criticar, condenar y quejarse, pero se necesita carácter y autocontrol para ser comprensivo y perdonar”.
Ahora bien, estas cosas pueden no ser fáciles de evitar por completo. Gran parte de nuestras interacciones y quizás incluso los lazos se crean y mantienen a través de esas tres acciones negativas (criticar, condenar y quejarse). Hay una especie de placer retorcido en criticar, condenar y quejarse. Podría hacerte sentir más importante y como una mejor persona al verte a ti mismo como una víctima o al condenar el comportamiento de otras personas.
Pero al final estas tres actitudes son negativas y limitan tu vida. Mencionar cosas negativas y revolcarse en ellas disminuirá tu estado de ánimo, motivación y niveles generales de bienestar. Y esto puede atraparte en una espiral negativa de quejas y condenas con otras personas que también se quejan y están siempre encontrando fallas en tu realidad.
También estarás transmitiendo y recibiendo emociones negativas. Y la gente en general quiere sentirse bien. Entonces, esto realmente puede poner un obstáculo en el camino para tus interacciones o relaciones.
4. ¿Qué es lo más importante?
“El camino real hacia el corazón de un hombre es hablarle sobre las cosas que más atesora”.
Consejo clásico: No hables demasiado de ti y de tu vida. Escucha a otras personas en vez de hablar de ti. Sin embargo, si las personas divagan una y otra vez, si no corresponden y no muestran interés en tu vida, entonces no tienes que quedarte.
Algunas cosas que las personas pueden atesorar más incluyen ideas, hijos, un pasatiempo especial y el trabajo. Y…
5. Concéntrate hacia afuera, no hacia adentro.
“Puedes hacer más amigos en dos meses interesándote en otras personas que en dos años tratando de que otras personas se interesen en ti”.
Mucha gente usa la segunda forma de acción, mucho menos efectiva. ¡Es atractivo porque se trata de gratificación instantánea y de YO, YO, YO! La primera forma de interesarse por las personas quizás funcione mejor porque te convierte en una agradable excepción y porque la ley de la reciprocidad es fuerte en las personas.
De la forma en que tratas a las personas, ellas te tratarán a ti. Interésate por ellas y ellas se interesarán por ti.
Me gustaría agregar que una cosa difícil de esto puede ser estar genuinamente interesado en la otra persona. Tu interés genuino se proyecta a través de tu lenguaje corporal y tonalidad.
Por lo tanto, simplemente esperar a que la otra persona deje de hablar para hablar de nuevo no es algo que muestre realmente un interés genuino. Y eso se nota. Y así tus interacciones sufrirán. Recuerda, el interés debe ser genuino.
6. Toma el control de tus emociones.
“La persona que busca todos sus aplausos en el exterior, tiene su felicidad en custodia de otro.”
Esta situación consiste en depender demasiado de la validación externa de otras personas. La validación externa es algo que alguien te comunica que te dice que eres una persona de valor. Que tú, por ejemplo, eres guapo, inteligente o exitoso.
Esto deja gran parte de tus emociones en manos de otras personas. Te lleva a una montaña rusa emocional. Un día te sientes genial. Al día siguiente te apetece quedarte en la cama.
Pero si llenas esa copa interior de validación por tu propia cuenta, entonces tú eres quien toma el volante. Ahora estás conduciendo, ahora controlas cómo te sientes. Todavía puedes apreciar los cumplidos, por supuesto, pero no dependes de ellos.
Esto te hará más estable emocionalmente y te permitirá cultivar y desarrollar tus músculos emocionales de una manera más controlada. Por ejemplo, puedes ayudarte a ti mismo a ser más optimista o entusiasta la mayor parte del tiempo. Esta estabilidad y crecimiento pueden ser de gran ayuda en tus relaciones.
7. No, los demás no te están frenando.
“En lugar de preocuparte por lo que la gente dice de ti, ¿por qué no dedicar tiempo a intentar lograr algo que las personas admiren?”.
Preocuparte demasiado por lo que la gente piensa creará dudas y alimentará monstruos imaginarios dentro de tu mente. Por ejemplo, puedes pensar que la gente te condenará si intentas algo.
Tal vez lo hagan. Pero la mayoría de las veces las personas están pensando en sus propios desafíos y altibajos. Simplemente no les importa mucho lo que haces.
Esto puede sentirse como una decepción. Pero también puede ser algo liberador. Te ayuda a eliminar los obstáculos internos que te están frenando.
A medida que, poco a poco o de un solo golpe, sueltas esos frenos internos, te vuelves más tú mismo. Te vuelves más seguro, tienes más posibilidades de éxito y sentirás más sentimientos positivos y menos negativos. Todas estas cosas pueden dar un gran impulso a tus interacciones y ayudarte a mejorar esas habilidades sociales.
8. Entonces, ¿Qué hay para mí?
“Solo hay una forma… de hacer que alguien haga algo. Y eso es haciendo que la otra persona quiera hacerlo”.
Si quieres que alguien haga algo, ¿les importará tu motivación para hacerlo? Tal vez. Pero a menudo no tendrán tanto interés en lo que tú quieres de una situación en particular.
Quieren saber qué provecho y beneficios pueden obtener. Entonces, para que ambos obtengan lo que quieren de algo, díle a esa persona qué beneficio hay para él o ella. Y trata de ser genuino y positivo al respecto.
9. Cómo ganar una discusión.
“La única forma de ganar en una discusión es evitarla”.
Tener dos egos envueltos en una discusión, tener dos lados defendiendo sus posiciones desesperadamente, no mejorará las relaciones.
Es más probable que sientan sentimientos negativos el uno hacia el otro mucho después de que termine la discusión. Y entonces ambos se mueven en un terreno de negatividad y como resultado pierden. Cuando sea posible, tratar de evitar argumentos innecesarios es una situación en la que todos ganan.
10. Todo tiene que ver con las palabras que dices
“Hay cuatro formas, y solo cuatro formas, en las que tenemos contacto con el mundo. Somos evaluados y clasificados por estos cuatro tipos de contactos: lo que hacemos, cómo nos vemos, lo que decimos y cómo lo decimos”.
A menudo siento que se pone demasiado énfasis y se piensa demasiado en la tercera forma de contacto (lo que decimos).
No te olvides del resto. Lo que decimos es sumamente importante para la construcción de nuestras relaciones.
La mayoría de las personas estereotipan a las personas en su primera reunión. Es posible que no quieran, pero esa es una forma en la que su mente, y quizás la tuya, organiza las impresiones y las personas. Así que piensa en cómo te ves. Piensa en cómo das tu primera impresión. Piensa en tu lenguaje corporal. Y cómo estás diciendo tus frases.
Piensa en cómo te sientes porque eso se reflejará en el mundo. Y el mundo a menudo reflejará algo similar para ti.
Con información de The Positivity Blog.
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