Crecí en las tierras de cultivo de Missouri, donde pensé que la riqueza era una bicicleta y dos pinzas para la ropa que sostenían, colocando cartas a los radios para que mi bicicleta sonase como una motocicleta (al menos en mi mente).
Cuando las camisas de madra estaban «de moda», mamá me hizo una, pero las mangas eran demasiado cortas, así que agregué a mi concepto de riqueza una camisa madra comprada en una tienda, que tenía mangas lo suficientemente largas.
Por supuesto, al cumplir veinte años, mis objetivos se hicieron más grandes, pero la idea de ganar US$ 100.000 o más por mes nunca entró en mi cabeza. Ahí está el primer problema. La mayoría de nosotros nunca puede beneficiarse del potencial de ingresos ilimitados de la creación de redes porque nuestras necesidades primarias se cubren con un ingreso de sustancialmente menos de un millón de dólares al año. Los objetivos personales que involucran la riqueza material son raramente muy grandes.
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Una de las preguntas más frecuentes que encuentro en las conferencias es por qué tan pocas personas en mi antigua organización ganaron tanto como yo. ¿Era porque estaba mejor capacitado o era porque mi sistema de construcción de negocios no puede ser duplicado? No fue ninguno de los dos. La razón fue que, poco antes me involucré en el mercadeo en red, y creé, por primera vez en mi vida, un objetivo significativo más grande que yo. Mis asociados no podían imaginar objetivos tan grandes.
Conocí a un tipo en Austin que había descubierto una forma de ayudar a los pobres y a los presos a escapar del alcoholismo y la drogadicción. Eso me emocionó. La adicción se había convertido en un gran negocio en el que solo aquellos con un buen plan de salud o US$ 25,000 fueron admitidos en el tratamiento. Sin embargo, un gran porcentaje de personas sin hogar y los delincuentes, son adictos y no tienen un lugar donde acudir. Sin el objetivo de financiar ese proyecto, podría haber dejado de trabajar con bastante facilidad cuando mis ingresos fueron de US$ 6,000 al mes. En cambio, seguí construyendo hasta que estaba ganando suficiente dinero para hacer algo bueno. La primera razón lógica para crear un significado u objetivo mucho más allá de nuestras propias necesidades personales, es que la mayoría de nosotros se quedará corto en el potencial una vez que las necesidades primarias se han cumplido.
Las posesiones materiales no traen alegría o satisfacción. La mayoría de las personas que nunca han experimentado los problemas de vivir en una jaula dorada discuten sobre ese punto. La gente me dice; «Caramba, Yarnell, me gustaría experimenta ese problema solo una vez». Eso es porque no lo han hecho.
En el análisis final, al terminar estarás casi tan feliz como decidas serlo, en cualquiera que sea tu nivel de ingresos. No tendrás absolutamente nada que ver con dinero o cosas. Si tú matrimonio tiene problemas, un nuevo bote o automóvil no cambiará la situación. Si estás bebiendo demasiado y te mudaste a una casa más grande, simplemente tendrás más habitaciones en las que puedas emborracharte. Si tu padre te odia y le das un viaje a las Bermudas, él te odiará desde la isla. Si no estás ganando calidad, pasa tiempo con tus hijos, es más importante porque aunque les des autos deportivos nuevos, nunca recuperarás el tiempo con ellos.
Nada trae una realización más verdadera que la creación y el logro de objetivos significativos diseñados para desinteresadamente ayudar a aquellos que no pueden ayudarse a sí mismos o aquellos que realmente necesitan la ayuda. El reconocimiento, incluso si es anónimo, está más allá de tus sueños más locos.
El hecho es que si no puedes descubrir algunos motivos específicos para ganar un millón de dólares o más, al año a través de una oportunidad de mercadeo en red… nunca lo harás. Simplemente no convocarás el impulso y la pasión para cumplir el objetivo. Casi todos tienen algo de pasión, algo de interés que puede ser beneficioso para otros. Mira alrededor de nuestro mundo y elige algo sobre lo que puedas apasionarte. Inicialmente, es posible que desees determinar una cantidad en dólares para incluirla en una cuenta especial con el propósito específico de ayudar a los demás. Pero no esperes mucho para identificar objetivos específicos.
Si bien es virtualmente imposible invertir US$ 30,000 al mes de forma inteligente, es fácil regalar eso de forma anónima. Cuanto más apasionado seas personalmente, mejores serán los objetivos. Créeme.
Vía | Mark Yarnell
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