Por qué una de las nuevas reglas más importantes del dinero es la necesidad de tener velocidad.
Cuando era niño, mi padre (y muchos de los padres de mis amigos) fueron a Sears para comprar desde electrodomésticos y herramientas, hasta ropa. En ese momento, Sears era considerada una de las tiendas minoristas de mayor éxito en el mercado. La torre Sears, ubicada en Chicago, fue el edificio más grande del mundo. No parecía haber nada que alguna vez los derribara.
Pero ese fin de semana surgieron rumores de que un poderoso gigante del comercio minorista se estaba preparando para declararse en bancarrota. Según el «Wall Street Journal», «Sears tiene más de US$ 11 mil millones en pérdidas acumuladas desde 2011, y sus distribuciones anuales han caído casi un 60% en ese período a US$ 16.7 mil millones. Los analistas dicen que necesita recaudar más de US$ 1 mil millones al año para mantenerse a flote”. La compañía tiene que pagar una deuda de US$ 134 millones y, a menos que los acreedores la rescaten, no tendrá más remedio que solicitar la protección por bancarrota.
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A muchos jóvenes que no han crecido con Sears como un ícono de este tipo les resultará difícil entender qué tan importante es ver a una compañía de este tamaño caer tan rápidamente, pero estoy seguro de que tendrán la oportunidad durante toda su vida para ver suceder cosas similares. Es la manera en que los gigantes caen cuando las empresas de nueva creación vienen tras ellos.
Entonces, ¿qué pasó con Sears?
Amazon
Cuando se trata de la caída de enormes compañías, a menudo se produce de forma precipitada y rápida, aparentemente sin previo aviso… para aquellos que no están prestando atención.
Según «The Wall Street Journal», los ingresos históricos de Sears tuvieron una buena racha de crecimiento desde su salida a la bolsa, a comienzos de los años 80 y hasta mediados de los 90. Luego se suavizaron un poco a finales de los 90, justo en el momento en que los minoristas en línea comenzaron a aparecer.
Recuerdo cuando la gente comenzó a comprar en línea. Muchos pensaron que sería una moda pasajera. Después de todo, quienes confiarían en poner la información de su tarjeta de crédito en algún sitio web aleatorio. Entonces, no es sorprendente que Sears viera un pequeño bamboleo durante ese tiempo, pero estoy seguro de que se sintieron envalentonados cuando vieron que sus ingresos comenzaron a crecer nuevamente a fines de los 90, justo en el momento de la OPI de Amazon.com.
Como se pudo apreciar, el negocio comenzó a despegar a principios de la década de 2000 y su participación de mercado en el sector del comercio electrónico también lo hizo. Pero luego los ingresos de Sears comenzaron a caer desde el acantilado a principios de los años 2000. Una fusión desesperada con K-Mart en 2006 dio un pequeño impulso, pero solo empujó el problema por el camino, ya que pronto vieron una vez más las fuertes pérdidas.
Retrospectiva 20/20
Hoy en día, esto probablemente parece una observación obvia de lo que le sucedió a Sears. Pero hace veinte años, cuando Amazon IPO había hecho su aparición, te puedo decir que no fue así. En ese momento, nadie pensó que un minorista en línea recién llegado iba a derrotar a un gigante como Sears, y ciertamente nadie iba a imaginar el hecho de que en veinte cortos años esta gran compañía se declararía en bancarrota.
Pero una vez más, esto no es nuevo. Tomemos a Kodak, por ejemplo. Como escribí hace unos años:
- En 2012, Kodak se declaró en bancarrota. Durante años habían gobernado el mundo de la fotografía, pero ahora estaban fallando. ¿Por qué? Porque ante el auge de la fotografía digital, Kodak no respondió como una compañía fuerte. Pensaron que eran demasiado grandes para caer.
- Lamentablemente, no fue así. De hecho, la peor parte es que Kodak había inventado la fotografía digital años antes y fácilmente podría haber sido el primero en el mercado. En su lugar, se sentaron sobre la tecnología porque temían canibalizar su negocio principal de la fotografía física …
- … Mientras Kodak entendió la necesidad de las tecnologías digitales (el qué), no pudieron comprender cómo las usarían las personas (el por qué). En cambio, optaron por confiar en las técnicas comunes que empujaban a las personas a imprimir sus fotografías, una forma de pensar de la era industrial.
- Kodak estaba tan concentrado en lo que hicieron, en sus fotos, que no recordaron por qué las hicieron, para compartirlas. En lugar de centrarse en las tecnologías que facilitaron el uso compartido, optaron por centrarse en los mecanismos que facilitaron la creación de las fotos mientras mantenían los obstáculos para compartirlas.
Por supuesto, Instagram llegó y se robó el show. Cuando fueron comprados por Facebook por US$ 1 mil millones, tenían 13 empleados. Hoy, «traerán alrededor de US$ 6 mil millones en ingresos por publicidad este año, con proyecciones de que ganarán US$ 20 mil millones para 2020, una cuarta parte de los ingresos totales de Facebook».
Sears, como Kodak y como muchas otras empresas, simplemente se hizo demasiado grande y lenta para mantenerse al día con la competencia. En ese momento, pensaron que estaban tomando las medidas correctas para proteger su participación en el mercado y continuar con el status quo, pero cuando se trata de los mercados nunca hay esta situación. Solo hay un movimiento rápido y la adaptación al cambio. Si fallas en eso, mueres. Ahora le está pasando a GE, una compañía de 125 años.
La necesidad de la velocidad
Hace un tiempo, escribí sobre las nuevas reglas del dinero. La quinta nueva regla del dinero es “la necesidad de la velocidad”.
Con la tecnología cambiando tan rápidamente, es muy importante comprender que nuestro tiempo es un momento en el que la información es moneda y el conocimiento es dinero. Para sobrevivir necesitas adaptarte y cambiar a la velocidad de la información.
La buena noticia es que esto significa que cualquiera puede llegar a ser extremadamente rico si se mueve lo suficientemente rápido y tiene la capacidad de comprender la información que está procesando más rápido que la competencia. Instagram vio esto. Amazon vio esto. Muchos otros lo hicieron también.
La caída de Sears y Kodaks del mundo financiero no es una historia fascinante porque estos gigantes fueron derribados. No, es interesante porque las nuevas empresas rápidas lo hicieron. Y cualquiera puede comenzar una compañía que haga esto, incluso tú.
Esto es muy cierto, sin embargo, todos los que no crezcan y no se adapten a la velocidad necesaria, sufrirán financieramente en los próximos años, no solo las empresas, sino también los individuos. Después de todo, todos son empleados de esas gigantes y lentas compañías.
Entonces, si quieres prosperar financieramente mañana, comienza a pensar a la velocidad de la información de hoy.
Vía | Rich Dad
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