En su carrera de cinco décadas estudiando el logro de metas personales, el psicólogo social, el doctor David McClelland llegó a una conclusión impactante: hasta el 95% de tu éxito o fracaso en la vida depende de las personas con las que pasas tiempo regularmente.
La comunidad de desarrollo de liderazgo valora mucho la responsabilidad personal: el único responsable de tus resultados eres tú. Tus pensamientos, creencias y hábitos influyen en tu resultado. Perfecciona tus habilidades, refina tus disciplinas y obtén las recompensas. Pero si el doctor McClelland tiene razón, entonces el hecho de que consigas o no el ascenso, pierdas peso, inicies un negocio, escribas el libro que deseabas escribir y logres tus sueños está determinado por tu círculo social.
¿Por qué? Porque los humanos compartimos muchas cosas por osmosis. Sus pensamientos se convierten en nuestros pensamientos: sus creencias en nuestras creencias; sus hábitos en nuestros hábitos. El psicólogo ruso Lev Vygotsky dijo: «A través de los demás, nos convertimos en nosotros mismos». Y es verdad. Lo que nos rodea eventualmente encuentra su camino dentro de nosotros y determina cómo vivimos nuestras vidas.
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Entonces, ¿Cómo nos aseguramos de que nuestro círculo social nos prepare para el éxito?
A continuación te presentamos algunas ideas básicas que pueden ayudarte.
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Comencemos aclarando que fijarte en una meta no significa que tienes que romper relaciones con tu grupo de amigos actual. Simplemente significa asegurarte de pasar más tiempo con personas que tengan creencias y hábitos que respalden tu éxito. Específicamente, estos tres tipos de personas te empoderarán para que puedas alcanzar tus metas:
1. Personas que te inspiran a enfocarte en tus metas personales
La inspiración a menudo da origen a metas, ¡pero también es necesaria para mantenerlas vivas! Todos necesitamos personas que nos alienten, nos animen y nos eleven a un nivel superior. Algunas personas simplemente tienen ese efecto en nosotros. Cuando estamos con ellos, nos motivan a vivir más fuertes, pensar mejor, trabajar más duro y arriesgar más. ¡Nos obligan a continuar!
Una de las cosas de perseguir nuestros sueños es que a menudo nos desviamos y tomamos desvíos no deseados. En esos momentos, necesitamos personas que permanezcan con nosotros.
2. Gente que es honesta contigo sobre tus metas personales
Necesitamos personas en nuestro círculo que estén dispuestas a decirnos la verdad. Esto puede parecer al principio contradictorio con el objetivo de incluir personas que nos inspiren, pero no es así. No buscamos gente que quiera derribarnos. Más bien, buscamos personas que estén dispuestas y sean capaces de brindarnos comentarios constructivos. Esto es especialmente importante en el área de los objetivos porque, como afirmó el orador griego Demóstenes, «Nada es tan fácil como engañarse a uno mismo; porque lo que deseamos, lo creemos fácilmente».
Mucha gente nunca pide comentarios honestos de los demás. Temen la realidad y la verdad, les preocupa que alguien que les diga la verdad los desanime tanto que los lleven a rendirse. Pero perseguir un objetivo sin recibir comentarios honestos suele ser poco más que una fantasía. Y un sueño que no puede sobrevivir a una crítica honesta es un sueño que probablemente nunca se alcanzará.
El autor Stephen R. Covey observó agudamente: «Se necesita humildad para buscar retroalimentación. Se necesita sabiduría para entenderla, analizarla y actuar apropiadamente en consecuencia». También se necesita humildad para mostrar aprecio por el coraje de una persona de brindar comentarios honestos. Y la buena noticia es que si pides consejos y muestras agradecimiento, envías un mensaje de que tu deseo de crecer es más grande que tu ego e invitas a recibir comentarios futuros que te ayudarán a seguir mejorando.
3. Personas que tienen las habilidades que tus metas personales necesitan
No puedes hacer todo por tu cuenta. Nadie puede. Las personas exitosas buscan ayuda de personas que tienen habilidades en áreas distintas a las suyas.
El tipo de personas que necesitas en tu equipo depende de unas habilidades, experiencia y temperamento particulares. Piensa en tu estrategia para lograr tu sueño. ¿Qué hay que hacer para lograrlo? ¿Cuál de esas cosas se adapta mejor a tus habilidades? ¿Cuáles requerirán la ayuda de otras personas con diferentes habilidades? ¿Dónde necesitarás personas con experiencia? ¿Qué tipo de tareas requerirán un temperamento diferente al tuyo?
Concluyendo
Realmente no existe una persona que se haya hecho a sí misma sola. Las personas que tienen éxito han recibido ayuda de otros a lo largo del camino, quieran o no reconocerlo. Conocer esta verdad puede liberarte para admitir que necesitas ayuda y empezar a buscarla. Y ese es un paso crucial en el proceso de lograr el éxito. El siguiente paso es incorporar a esas personas para que estén dispuestas a emprender el viaje hacia el sueño contigo.
Con información de Maxwell Leadership.
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