*El siguiente artículo fue escrito por Randy Gage y fue publicado originalmente en su blog.
¿Cuántas veces has escuchado a un autor o orador motivacional decir esa vieja y cansada frase sobre cuánto dinero ahorraría al año si preparara su propio café y no comprara uno en una cafetería? Es cierto, podrías ahorrar mucho dinero.
También es un pésimo consejo para crear una vida próspera…
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De hecho, YouTube, programas de televisión, blogs, libros, podcasts y programas de radio están repletos de terribles consejos sobre cómo ser próspero. Parte de esto solo se centra en el dinero, en acumular un mayor patrimonio neto sin considerar los aspectos holísticos de una vida abundante. El problema con este enfoque es que si gastas todo su tiempo y energía tratando de escatimar, ahorrar y cupones, en realidad podrías estar perjudicando tu progreso hacia la creación de riqueza. Y si tu enfoque predominante está orientado a cómo adquirir más dinero, eso no tendrá en cuenta los muchos otros elementos de una vida próspera. Centrarte solo en la riqueza hace que pierdas de vista algo profundo:
Probablemente no desees realmente más dinero…
Lo que realmente deseas son las cosas por las que puedes cambiar ese dinero. Es por eso que tan pronto como reciben dinero, la mayoría de las personas lo cambian de inmediato por las cosas que realmente quieren: el nuevo álbum de Ariana Grande, una suite anual en el estadio de los Cowboys, un par de zapatillas, un nuevo iPhone, etc. Esto no pretende degradar o disminuir el valor del dinero Solo un tonto descarta el papel que el dinero puede desempeñar para vivir una vida feliz, saludable y próspera. A veces, las cosas por las que deseas cambiar tu dinero pueden brindarte mayor libertad o seguridad, lo que puede contribuir a tu prosperidad.
Antes de afirmar que el dinero no compra la felicidad, también debes reflexionar sobre el hecho de que estar arruinado tampoco compra la felicidad. No menospreciemos el dinero, sino simplemente reconozcamos el papel real que puede desempeñar al ayudarte a hacer lo que probablemente realmente desees: manifestar prosperidad. Y también reconozcas que acumular cantidades cada vez mayores de dinero no equivale a vivir prósperamente. La verdadera prosperidad requiere que tomes esa riqueza y también integres otros aspectos matizados de la prosperidad. Elementos como:
- Salud vibrante.
- Un enfoque espiritual de la vida
- Conciencia positiva.
- Relaciones empoderadoras.
- Trabajo o una misión que trae desafío, aventura y crecimiento a tu vida.
Esto te lleva al “punto dulce” donde realmente estás agradecido por todo lo que tienes y en lo que te conviertes, pero aún tienes el deseo apasionado y la capacidad de hacer, tener y convertirte en más. Este enfoque puede llevarte a crear una vida próspera.
Gran parte de los otros horribles consejos sobre la prosperidad no se centran en el dinero. Pretenden ser sobre el desarrollo de la conciencia de prosperidad, pero en realidad están saturados de conciencia de pobreza. Estos expertos enseñan que es inmoral desear una casa hermosa y que el secreto es reducir tus deseos hasta el punto de sentirte feliz con un apartamento pequeño. El problema con este razonamiento es que si se sigue hasta su conclusión lógica, tendrías que seguir bajando tus expectativas hasta que te contentaras con no tener electricidad ni agua corriente, arrancando bayas fuera de tu choza con un techo de paja.
Aquí hay una pequeña muestra de la sabiduría convencional que se difunde sobre la prosperidad, a la que yo calificaría conciencia de la pobreza:
- Vuele en clase turista en lugar de ejecutiva o primera clase.
- Calienta una pizza congelada en el microondas en lugar de recibir un pastel caliente recién hecho en una pizzería.
- Solo compra autos usados.
- Toma la habitación del hotel con “vista de la ciudad” (la que da a un contenedor de basura detrás de la vista del restaurante de al lado) en lugar de la vista del mar.
- Compra un condominio o una casa en una zona barata.
- Mantén flores de plástico en lugar de flores reales.
Podría ahorrar literalmente miles de dólares al año si decidiera cancelar mis entregas de flores frescas y reemplazarlas comprando tres jarrones de flores de plástico. Personalmente, es difícil concebir una capitulación más aplastante de vivir una vida hueca que comprar un arreglo floral de plástico. ¿Qué hay de próspero en eso?
Muchos de ustedes se privan de la prosperidad porque creen que abandonar las cosas y experiencias que les brindan alegría los hace nobles, virtuosos o les garantiza la vida eterna. Pero créeme, Buda, Jesús o el profeta Mahoma no estarían impresionados porque rechazaste la habitación frente al mar en Hawái. Es mucho más probable que piensen que no has prestado atención a sus enseñanzas o a las vidas que vivieron.
ProTip Ningún dios verdadero o líder espiritual quedará impresionado por tu intento de impresionarlos. (Todo lo contrario.)
Esto no quiere decir que debas comprar algo de equipaje de lujo, reservar dos boletos de primera clase a Tahití y adquirir una suite frente al mar hoy mismo. Si solo estás ganando 50.000 dólares o euros al año, no sería prudente comprar el nuevo Bentley Continental GT. En este momento, puede ser sensato que vivas en una casa más pequeña, salgas a cenar con menos frecuencia o limites tus gastos en entretenimiento. Simplemente no confundas estas acciones de moderación sensata como el camino hacia la prosperidad. Son simplemente un pequeño elemento en el curso que debes seguir para ser más próspero.
Debido a que viajo mucho por el mundo, viajar con lujo es importante para mí. Para algunas personas podría ser coleccionar arte y para otras podría ser ir a pescar los fines de semana. La situación ideal requiere encontrar el equilibrio entre permitirse algunos de los lujos que mejoran tu vida ahora, mientras postergas otras cosas para invertir esos recursos en acciones que garantizarán una vida próspera en el futuro. (Este futuro, en esta vida, no en un futuro del más allá).
Permíteme brindarte algunos consejos mucho más efectivos para crear seguridad financiera y manifestar una vida saludable, feliz y próspera.
Los 3 principales objetivos de dinero:
Haz que tu meta monetaria número uno sea estar libre de deudas, lo más rápido posible. La deuda solo debe usarse para aprovechar más prosperidad, nunca para buscar una gratificación instantánea.
Haz que tu objetivo monetario número dos sea encontrar formas de aprovechar el poder del apalancamiento. El apalancamiento es el superpoder para generar riqueza. Tienes que escapar del modelo limitante de intercambiar tiempo por dinero, para crear saltos cuánticos en tu creación de riqueza.
Haz que tu objetivo monetario número tres sea poner tu riqueza a trabajar, para que te despiertes todos los días más rico de lo que eras que cuando te fuiste a dormir la noche anterior.
Los 3 principales objetivos de prosperidad:
Haz que tu principal meta de prosperidad sea ser la mejor versión posible de ti mismo. Esto crea automáticamente efectos colaterales para mejorar tu salud, tus relaciones y tu éxito general.
Haz que tu meta de prosperidad número dos sea mantener, o si es necesario, recuperar u obtener, tu salud física óptima. Si tu pensamiento no es limpio y tu cuerpo no puede seguir el ritmo de tu mente, es extremadamente difícil dar los pasos necesarios.
Haz que tu objetivo de prosperidad número tres sea crear momentos en tu vida. No vivas en el pasado con arrepentimiento, no vivas en el futuro con miedo, vive el momento con asombro. Nadie yace en su lecho de muerte pensando en el Lamborghini que poseía. Reflexiona sobre los momentos mágicos con tus seres queridos.
Con mis mejores deseos,
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