La serie documental de Amazon Prime, LuLaRich, profundiza en por qué LuLaRoe, y otras compañías fraudulentas que se hacen pasar por sistemas multinivel, son tan insidiosamente peligrosas. La serie de televisión documental al estilo de exposición revela los secretos insidiosos de esta compañía; presenta entrevistas con los fundadores de LuLaRoe, DeAnne Brady y Mark Stidham, así como con consultores actuales y anteriores de LuLaRoe para analizar el funcionamiento interno del fenómeno de la moda.
LuLaRoe, empresa conocida por vender leggings suaves y atractivos con patrones de colores trepidantes, se convirtió en una sensación del MLM de la noche a la mañana, pero detrás del telón, las cosas no eran exactamente lo que parecían.
Esta compañía es un claro ejemplo de que no basta tener un producto real para que una empresa con un modelo de mercadeo en red pueda considerarse legítima. Además de eso debe existir un plan de pagos funcional y un equipo corporativo honesto que se encuentre respaldando el desarrollo de la compañía y que pueda responder por la proyección futura de la misma. De lo contrario nos encontraremos ante una estafa piramidal más que usa un producto excusa con el fin de enriquecer únicamente a unos pocos y que está en contra de todos los principios de la industria.
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LuLaRich muestra las muchas formas en que LuLaRoe utiliza prácticas comerciales depredadoras y poco éticas para explotar a sus consultores, convirtiéndose así en una mancha para el nombre de la industria y causando un gran daño a todo el modelo del negocio. Como revela el documental de Amazon Prime, en muchas ocasiones es fácil confundir a las empresas de mercadeo en red legítimas con los esquemas piramidales; La FTC ha acusado a algunas empresas de la industria, algunas legítimas y otras que son fraudes encubiertos, de ser esquemas piramidales.
En las estafas piramidales que usan el nombre de la industria, se les vende la idea a muchos consultores de ser emprendedores y dueños de sus propios negocios con grandes y rápidas ganancias, aunque en las empresas de mercadeo en red legítimas las ganancias sustanciales requieren de mucho esfuerzo y toman un tiempo notable en hacerse realidad. Este tipo de estafas no solo son peligrosas para los involucrados, sino que le están costando mucho a aquellas empresas de la industria que sí hacen un trabajo honesto y juegan de acuerdo a las reglas.
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Estafas piramidales que buscan personas vulnerables
Las estafas piramidales que se disfrazan de negocios multinivel legítimos se dirigen de manera desproporcionada a los más vulnerables en sus finanzas (y de alguna manera a los más vulnerables emocionalmente). Estas empresas prometerán ingresos adicionales, rápidos y fáciles para las familias. Con declaraciones de ingresos engañosas y un ejército de promotores que saben que el negocio es una estafa y continúan promocionando a las compañías en todas las redes sociales, es factible que muchas personas caigan en este tipo de engaños y más aún teniendo en cuenta el hecho de que se mimetizan de forma muy astuta, aparentado ser compañías de MLM legítimas.
LulaRoe y su pretensión de ser una empresa de mercadeo en red legítima
Según muestra LuLaRich, los MLM se enfrentan con frecuencia a la acusación de ser esquemas piramidales, aunque no todas las empresas lo sean. Los esquemas piramidales son estafas con una configuración jerárquica que se basa en que los participantes recluten nuevos miembros que son necesarios para que la empresa sea rentable. Este modelo favorece mucho a los que están en la parte superior, mientras que garantiza que los que están en la parte inferior obtendrán poca o ninguna ganancia.
Una defensa común de las empresa de mercadeo en red legítimas contra estas acusaciones es que no pueden ser un esquema piramidal porque ofrecen un producto; sin embargo, una mirada más cercana a la estructura comercial de algunas empresas revela que en muchas de ellas el producto es usado como una excusa para recaudar dinero para aquellos que están en la parte superior de la estructura y que el enfoque principal de los falsos multinivel es el reclutamiento en lugar de la venta directa a los clientes. El programa de Amazon Prime, LuLaRich, reveló la exorbitante cantidad que los nuevos consultores de LuLaRoe deben pagar poder participar en el sistema de compensación de la empresa; entre USD 5000 y USD 10,000. LuLaRoe, en su punto más alto, tenía más de 77.000 consultores; con una compra mínima de USD 5000, LuLaRoe recaudó USD 385 millones solo en tarifas de entrada.
En LulaRoe se recomendaba encarecidamente a los consultores que contrataran cada vez más consultores por debajo de ellos; Los consultores en el el extremo superior de la pirámide, ganaban bonos y comisiones según la cantidad de personas que podían reclutar debajo de ellas. Las verdaderas ganancias en un esquema piramidal provienen de un gran reclutamiento inicial en lugar de la venta de productos reales, lo cual sí ocurre en las compañías de mercadeo en red que son legítimas. En un esquema piramidal, por supuesto, es un objetivo que solo pueden alcanzar muy pocos y, por lo general, solo aquellos que ingresan al negocio desde el principio.
Al observar la declaración de divulgación de ingresos de LuLaRoe 2020, la estructura piramidal es clara. En 2019, la Oficina del Fiscal General del Estado de Washington presentó una demanda contra LuLaRoe. Según la serie de Amazon, sus declaraciones engañosas con respecto a los ingresos y el enfoque en el reclutamiento llevaron al supuesto MLM al territorio del esquema piramidal. En febrero de 2021, LuLaRoe pagó USD 4.74 millones para resolver la demanda. Los que están en la parte superior estaban ganando dinero a costa de los que estaban en su línea descendente, a veces aportando hasta seis cifras solo en las comisiones de la línea descendente.
Muchos consultores perdieron dinero con LuLaRoe
En el caso de LuLaRoe y de las empresas que se hacen pasar por empresas de mercadeo en red sin serlo, hay que aclarar dos cosas. Primero: En estas compañías, la mayoría de las personas pierden dinero. El estado de resultados de 2020 de LuLaRoe informó que el 18,6% de sus vendedores perdieron dinero; muchos de los cuales, según LuLaRich, pierden dinero debido a productos defectuosos o por ser presionados para comprar más mercadería de la que podrían vender. Cuando los consultores obtienen ganancias, se les anima a que vuelvan a invertir en su “negocio” comprando nuevos productos, invirtiendo en talleres para convertirse en mejores minoristas (que a menudo están en manos de la propia compañía” y otras empresas comerciales. Al final, la mayoría de los consultores se quedaban sin nada. Los líderes de LuLaRoe instaban a sus miembros a solicitar tarjetas de crédito y endeudarse por su “negocio” mientras que los que estaban en la cima de la pirámide llevaban una vida de lujo a costa de los que hacían compras exorbitantes en la parte inferior y se quedaban con muy pocas ganancias.
Una cultura de culto en LuLaRoe
Segundo: Las compañías fraudulentas que se hacen pasar por MLM legítimos promueven una cultura de culto. ¿Alguien recuerda OneCoin y el culto a la “doctora” Ruja Ignatova? Lo mismo sucede con muchas compañías que no pueden demostrar con la evidencia que son MLMs legítimos y que solo pueden recurrir a la emocionalidad de sus oyentes para continuar vendiendo sus fraudes. LuLaRoe promovió la imagen de “chicas jefes” viviendo sus mejores vidas, trabajando juntas en una red de hermandad. El tercer episodio de la serie de televisión de Amazon destaca la conexión entre las compañías fraudulentas y las sectas. ¿Quién no querría unirse a una empresa que se presenta como una hermandad en la que todos son solidarios unos con otros Sin embargo, debajo hay una historia completamente diferente. La cultura de estas estafas con frecuencia tiene como objetivo alienar a sus consultores hasta que confíen completamente en su empresa, tanto financiera como socialmente, mientras se deifica a sus fundadores.
El estilo agresivo de este tipo de compañías fraudulentas le ha costado a muchos consultores sus relaciones con amigos y familiares, ya que muchos se cansan de ver argumentos e invitaciones de venta en sus redes sociales y en sus buzones de mensajería. También se ha acusado a algunas de estas empresas fraudulentas de fomentar una cultura de la alineación. En LuLaRich, la ex consultora de LuLaRoe, Roberta Blevins, admite que le dijeron que debería “encontrar un nuevo marido” porque el suyo no quería vender LuLaRoe. Estas compañías fraudulentas hacen todo lo posible para aislar a sus consultores con el fin de mantenerlos dedicados, al igual que las sectas. Los miembros que eligen irse son marginados y se les dice a los consultores actuales que finjan que ya no existen. Muchos también comparten retórica religiosa, típicamente mormona, en el caso de LuLaRoe, y los fundadores de MLM son tratados como íconos religiosos o líderes de culto.
Lo que las compañías de mercadeo legítimas pueden y deben aprender del caso LuLaRoe
Actualmente las compañías de mercadeo en red y de venta directa legítimas están desarrollando estrategias para centrarse mucho más en los clientes y en la venta de productos reales, así como en la creación de valor real para las comunidades en las que operan, esto con el fin de poder diferenciarse claramente de las compañías fraudulentas que captan dinero o que usan productos excusa para hacerle creer al público que son compañías legítimas de MLM. Parte de estas iniciativas son los actuales reconocimientos que brindan medios de la industria como Direct Selling News a las empresas que tienen un enfoque claro y decidio en el cliente.
Finalmente, aunque hay que decir que el documental de Amazon LuLaRich es altamente crítico con la industria del mercadeo en red en general, este programa es de gran valor para poder reconocer a las empresas fraudulentas que se hacen pasar por MLMs legítimos así como las propias fallas dentro de la industria legítima que impiden que esta crezca en todo su potencial. En cualquier caso, el daño que LuLaRoe ha infringido a toda la industria es algo real y los promotores y defensores de las compañías de mercadeo en red legítimas deberían estar atentos a este tipos de comportamientos para que no sean replicados dentro de sus propias compañías y para que los nuevos networkers puedan diferenciar con mayor certeza a las empresas legítimas de aquellas que son fraudes, que no aportan valor a la sociedad y que solo van por su dinero.
Con información de Screen Rant
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