La Regla del 80 / 20 o Principio de Pareto, que lleva el nombre del economista italiano del siglo XIX, Vilfredo Pareto, quien descubrió que aproximadamente el 80% de las tierras italianas en 1896 era propiedad de 20% de la población, se ha convertido en un axioma común en los negocios y la vida.
El principio fue destacado en 1992 por un informe del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo que mostraba que aproximadamente el 80% de la riqueza mundial estaba en manos del 20% de la población. Las empresas han informado que el 80% de sus ventas provienen del 20% de sus clientes y, Microsoft descubrió que si solucionan el 20% de la mayoría de los errores informados, eliminan el 80% de los problemas en su software.
Parece que el Principio de Pareto está a nuestro alrededor.
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Cuando se trata de nuestra propia productividad, el principio puede aplicarse en que el 80% de nuestros resultados provienen del 20% de nuestros esfuerzos. El truco es descubrir qué es ese 20% para poder aplicar nuestro mayor esfuerzo a ese porcentaje y eliminar la mayor parte del 80% que no produce los resultados que queremos.
¿Entonces cómo hacemos eso?
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Sé absolutamente claro en lo que quieres lograr
La forma más fácil y efectiva de hacer esto es ser absolutamente claro sobre lo que estás tratando de obtener.
¿Cuál es el resultado que quieres conseguir? La mayoría de las personas no tienen claridad sobre qué es lo que quieren lograr y, por lo tanto, quedan atrapadas en trabajar en cosas que no aportarán una gran contribución al objetivo general.
Por ejemplo, si tienes un proyecto para mudarte de casa, dedicas una cantidad excesiva de tiempo a discutir el color que deseas que tengan las paredes, los muebles que te gustarían y las plantas que tendrás en el jardín que no te llevarán demasiado lejos de tu vivienda.
En cambio, decidir cuántas habitaciones y en qué lugar te gustaría la casa te daría datos mucho más importantes sobre los cuales poder acudir a un agente de bienes raíces. Vas a encontrar la casa adecuada mucho más rápido que al hablar de colores, muebles y artículos en tu jardín.
Antes de comenzar cualquier proyecto, haz una lista de todas las tareas involucradas para completar el proyecto y luego marca o resalta las labores que te darán la mayor contribución para completar el programa. Esas tareas serán el 20% de las actividades que te llevarán al 80% del camino para completar el plan. Céntrate en eso.
¿Cuáles son tus mayores y menores
Jim Rohn acuñó esta pregunta y esencialmente significa que hay partes del trabajo que realizas cada día que tienen una contribución directa al objetivo general que estás tratando de lograr. Otras partes de tu trabajo no tienen un aporte directo a esa meta, pero podrían describirse como tareas domésticas. El truco es saber cuáles son.
Brian Tracy a menudo habla de esto con el proceso de distribución. El momento más importante es cuando estás frente al cliente hablando con ellos. El instante de menor contribución es viajar hasta el cliente o estar en reuniones con tu gerente de ventas en la oficina. Por supuesto, viajar para ver a tu prospecto o reunirte con tu director es importante, pero no contribuyen directamente a tu rendimiento de mercadeo, por lo que se clasificaría como de menor importancia.
Cuando estuve en ventas hace muchos años, aprendí que si bien podrías ser popular entre tu equipo, si escribes meticulosamente tus informes de pedidos todos los días, hacerlo no mejorará el rendimiento de la comercialización. Observé que los mejores distribuidores de nuestra empresa eran los que tenían una reputación de administrador terrible y no eran las personas más populares en la oficina. La cuestión es que eran los mejores distribuidores porque entendían que estar frente al cliente conducía a mayores entregas, lo que finalmente llevaba a salarios más altos.
Echa un vistazo a tu calendario de la semana pasada e identifica qué tareas realizaste que tuvieron el mayor impacto positivo en tus objetivos. Luego, haz planes para hacer más de eso la próxima semana, de modo que estés trabajando en el 20% de las tareas que sabes que tomarás para lograr el 80% de los resultados que deseas.
Deja de pensar, y empieza a hacer
Me encuentro con muchos de mis clientes cuando los entreno en el desarrollo de sus propios negocios. Se gasta demasiado tiempo en planificar y pensar.
Ahora, la planificación y el desarrollo de ideas tienen su lugar cuando estás creando tu propio negocio, pero hay una línea. Si pasas el 80% de tu tiempo pensando y planificando, tu negocio no se lanzará.
Tomemos un ejemplo simple. Cuando comencé mi canal de YouTube hace poco más de tres años, pasé una semana planeando qué tipo de videos produciría y luego comencé a grabar. Mi primer trabajo fue terrible, pero el proceso de publicación de los audiovisuales, semana tras semana me permitió aprender mejores maneras de producir material que impulsó el crecimiento de mi canal.
Veo demasiadas personas planificando y pensando en lo que quieren hacer y no producen el contenido. Si pasas el 80% de tu tiempo produciendo material y el 20% de tu horario planificando ese contenido, sin importar para qué medio estés trabajando, verás resultados positivos. Si cambias esa proporción, no obtendrás mucho de los frutos que esperas.
Detente un momento ahora mismo y pregúntate: «¿Qué podría hacer hoy que me dé el 80% de los resultados que más deseo?»
Usa tu calendario para revisar cómo pasaste tu tiempo
Tu calendario es tu herramienta analítica más poderosa cuando se trata de ver cómo pasas tu tiempo cada semana. Si ves que estás gastando gran parte de tus horas diarias en reuniones y tratando con problemas de compañeros de trabajo, descubrirás que no estás concentrado en el 20% de los resultados reales.
Si te has tomado el tiempo de anotar las actividades que te dan el 80% de tus resultados, entonces revisa tu calendario al final de la semana para ver dónde estás gastando tu horario y podrás hacer los ajustes necesarios; por lo que estás más centrado en las actividades que te dan los mejores resultados positivos. Bloquea el tiempo cada día para trabajar en esas tareas.
Intenta eliminar aquellas actividades que no aportan mucho a modo de resultados. Si puedes hacerlo, delega a otras personas que logren completar esas labores por ti para que puedas dedicar más tiempo cada semana a otras tareas. Esto te dará un mejor retorno de tu inversión de tiempo.
Para aprovechar realmente el principio del 80 / 20, debes saber en qué estás gastando tu tiempo cada día.
Si tú eres un productor de contenido, entonces necesitas producir material, no perder tiempo revisando analíticas. Por supuesto, el análisis es importante si deseas ver un crecimiento, pero sin contenido, no tendrás ningún estudio en el que puedas basar tus temas a futuro. Por lo tanto, el 80% de tus horas deben gastarse en la producción de contenido.
Si estás en mercadeo, y gastas el 80% de tu tiempo planeando tus llamadas a tus prospectos, y solo el 20% de tus horas frente a tus clientes, el rendimiento de tus pedidos no va a ser muy bueno. Da la vuelta a esa ración. Pasa el 20% de tu tiempo planeando tus llamadas y el 80% frente a tus clientes.
Puntos clave
Entonces para hacer que la regla del 80 / 20 funcione para ti, recuerda esto:
- Sé muy claro acerca de lo que quieres lograr. ¿Cómo será un resultado exitoso? Luego identifica el 20% de los pasos de acción que te llevarán al 80% del camino del éxito.
- ¿Cuáles son tus mayores y menores? ¿Qué actividades diarias podría hacer para crear un movimiento constante hacia el logro de lo que quieres conseguir? Haz eso todos los días.
- Reduce la cantidad de tiempo que pasas pensando en hacer algo y simplemente comienza a hacerlo. Si estás gastando el 80% del tiempo analizando y solo el 20% de tu tiempo en hacerlo, tienes la relación de modo inverso.
- Identifica qué pasos de acción has tomado durante la última semana que tuvieron el mayor impacto positivo en tus metas. Haz más de ellos la próxima semana. Priorízalos y programa tu horario en el calendario.
Vía | Life Hack
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