Este libro te puede causar inquietud, miedo y un poco de ambición. Muchos describen este libro del famoso Robert Greene como un texto inescrupuloso, audaz y maquiavélico. ¿Lo leerías?
Las 48 leyes del poder son las que han usados grandes personajes de la historia para lograr escalar a lo más alto del poder.
Pero estas leyes se aplican a la vida diaria, al trabajo, a las relaciones, en la calle y casi en cualquier aspecto de la vida.
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Aunque Mastery (Maestría) es un gran libro, no es el que puso a Robert Greene en el mapa. Las 48 leyes del poder fue el libro que lo hizo.
Publicado en 1998 después de correr un gran riesgo al dejar su antiguo trabajo, que odiaba, el libro se convirtió en un éxito de ventas y ahora ha vendido más de un millón de copias.
Es especialmente popular entre los raperos y artistas de hip-hop, pero muchas celebridades citan el libro y mencionan la influencia de las leyes en sus vidas. 50 Cent es solo uno de ellos, con quien Greene terminó colaborando en otro libro. La mayoría de las 48 leyes se basan en una situación específica de la historia, y aunque algunas de ellas parecen contradecirse entre sí, hay una valiosa lección que aprender de cada una de ellas.
Aquí hay 3 grandes lecciones sobre Las 48 Leyes del poder para ayudarte a entenderlo mejor:
- Siempre haz que los superiores se vean más inteligentes que tú.
- Confunde a los competidores actuando de manera impredecible.
- No obligues a los demás a hacer lo que tú quieres, sedúcelos en vez de ello.
A continuación brindaremos una revisión a las 3 grandes lecciones que podemos extraer de este libro. Hay que aclarar que estas son solo algunas de las invaluables lecciones de Las 48 Leyes del Poder.
Contenido
- 1 Lección 1: siempre haz que los superiores se vean más inteligentes que tú.
- 2 Lección 2: Comete errores a propósito para confundir a tu competencia.
- 3 Lección 3: Seduce a los demás para que hagan voluntariamente lo que tú quieres que hagan, en lugar de obligarlos a ello
- 4 Repaso de las 48 leyes del poder
- 5 Primero parte Las 48 leyes del poder
- 6 Primero parte Las 48 leyes del poder
Lección 1: siempre haz que los superiores se vean más inteligentes que tú.
Aquí hay una forma segura de no ser ascendido: Cuando tu jefe se encuentra con un problema que no puede resolver en su computadora, acércate a él y, mientras lo solucionas, dile: “¿Ves? Así es como lo haces. ¡No hay problema, estoy feliz de ayudar!”
Lo único que la gente en una posición de poder no quiere es parecer impotente y estúpida. Pero cuando haces alarde de tus habilidades frente a ellos, eso es exactamente lo que sucede. El ministro francés de finanzas del rey Luis XIV, Nicolás Fouquet, pagó esa lección con cadena perpetua. Cuando hizo una fiesta excesiva en su castillo a favor del rey, el rey lo acusó de robar, porque ningún hombre podía ser legalmente tan rico, y lo metió en prisión.
Entonces, en lugar de mostrar lo bueno que eres, haz que tu jefe parezca la persona más inteligente de la sala, incluso si sabes que no lo es. Regálale el crédito por lo poco o mucho que puede hacer y recibirás responsabilidad y poder a cambio.
Por ejemplo, cuando Galileo Galilei descubrió las cuatro lunas de Júpiter, podría haberse llevado todo ese crédito. En cambio, nombró las lunas en honor al Gran Duque, Cosme II de ‘Medici, y sus hermanos. Como resultado, Cosme lo nombró su filósofo y matemático oficial, asegurando la financiación de Galileo para su investigación en los años venideros.
Lección 2: Comete errores a propósito para confundir a tu competencia.
A veces, la competencia parece estar siempre un paso por delante de ti. Probablemente se deba a que han invertido tiempo y energía en investigarte y descubrir tus patrones de comportamiento. Cuando eso sucede, tu mejor movimiento es actuar de manera impredecible. Haz lo contrario de lo que crees que la gente espera, comete un error a propósito o simplemente desaparece por un tiempo.
El comportamiento erróneo saca a las personas de su juego de análisis, y mientras están ocupados tratando de descubrir tu nuevo patrón y explicando tu comportamiento, tú tienes la oportunidad de contraatacar.
Esta es una de las primeras lecciones que aprenden los buenos jugadores de póker. Si solo juegas manos cuando tienes al menos un par o más, los otros jugadores rápidamente te perseguirán y se retirarán cada vez que apuestes. Pero lanza un farol o dos, a los que te comprometes y aguantas, incluso si terminas perdiendo esas manos, y tus oponentes ya no pueden estar tan seguros.
Bobby Fischer usó exactamente esta estrategia para confundir a Boris Spassky en su partida por el título del campeonato mundial de ajedrez de 1972. Cometió un error de principiante en su primer juego, ni siquiera apareció para el segundo (y perdió por abandono, y regresó solo minutos antes de que comenzara el tercer juego. Luego comenzó a hacer demandas locas, como mover cámaras, cambiar de habitación y intercambiando sillas Finalmente, jugó aperturas completamente atípicas a su estilo habitual de ajedrez, y finalmente venció a Spassky para convertirse en el campeón mundial.
Lección 3: Seduce a los demás para que hagan voluntariamente lo que tú quieres que hagan, en lugar de obligarlos a ello
Incluso cuando ya estás en una posición de poder, las personas no siempre harán lo que tú quieres que hagan. Cuando ese es el caso, nunca debes recurrir a tratar de obligar a las personas a obedecer. En cambio, haz que sea imposible que no hagan lo que te gustaría que hicieran seduciéndolos.
Chuko Liang, el principal estratega militar de la antigua China, usó esto para derrotar a su enemigo, el rey Menghuo. En lugar de destruir todo su ejército, cuando atacaron China, los capturó a todos, y luego…
…sirvió al rey Menghuo excelente vino y comida. Sus soldados vieron esta generosidad, y después de que Liang estuvo seguro de que los había desconcertado, los liberó pero mantuvo al rey Menghuo como rehén. Solo después de amenazar que tendría que inclinarse ante el rey chino si lo capturaban nuevamente, liberó al enemigo. A lo largo de los años, Liang capturó a Menghuo una y otra vez, cada vez con la misma amenaza, pero siempre liberando a su prisionero. Después de la séptima vez, Menghuo se rindió, se inclinó ante el rey y se rindió por su propia voluntad.
Repaso de las 48 leyes del poder
Si eres una persona convencional, Las 48 leyes del poder no te dirán lo que quieres escuchar. Sin embargo, podría ser lo que necesitas escuchar, al menos en algunos casos. No estamos diciendo que todas las leyes deban aceptarse acríticamente, pero hay una razón sólida detrás de cada una de ellas. En definitiva, se trata de una gran lectura con mucho para aportar!
Echa un vistazo a Las 48 Leyes de Poder en los siguientes vídeos para que puedas entender de qué es que estamos hablando y cómo pueden ayudarte en tu camino al éxito.
Primero parte Las 48 leyes del poder
Primero parte Las 48 leyes del poder
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